emptyemptyemptyemptyemptycoloreameemptyconemptyelemptycoloremptydeemptylosemptyemptyemptyemptyemptyemptyemptyemptyemptyemptyemptyemptyemptyemptyemptyemptyemptyemptyemptyproblemas

viernes, 27 de mayo de 2011

Me partí por la mitad y dejé la peor parte

Echo de menos la ilusión por levantarme cada mañana. Echo de menos sentirme especial, las tardes de lluvia enredados entre las sábanas de tu cama, el sabor a chocolate de tus labios. Echo de menos imaginarme a tu lado cada día, ilusionarme por una llamada o un sencillo mensaje de texto, vestirme pensando qué imaginarás al verme. Echo de menos pensarte, soñar con tus brazos rodeando cada centímetro de mi piel, las sonrisas cargadas de magia, el calor que desprendías en las noches del frío de Noviembre. Echo de menos los días que pasaban volando y las noches eternas repletas de "te quiero", la seguridad de saber que siempre ibas a estar, el susurro de tu voz en mi oído, esa mirada que me dejaba anonadada.

Echo de menos tantas cosas... Pero, sin lugar a dudas, lo que más echo de menos es tener a una persona a la que poder dedicarle estas necias palabras.









Hace mucho que espero. Tal vez desde aquel día busqué (sin bien saber) tu cuerpo verdadero.

(Luis Antonio de Villena, Adveniat tuum regnum)

No hay comentarios:

Publicar un comentario