miércoles, 13 de febrero de 2013
La vida se convierte en un juego de niños cuando tú estás junto a mi
sábado, 10 de septiembre de 2011
Nunca hubiera pensado que el mar era así
Piensas que no te quedan apenas fuerzas para continuar aleteando entre las algas de esas aguas tan cristalinas, que probablemente te dejes secar en lo alto de una roca para después fundirte con la espuma de las olas del mar, que tu voz ha perdido ese timbre melódico que tanto te hacía destacar.
Y aun con todo, tu suave figura no cesa de escurrirse entre el resto de los seres marinos, la sonrisa aflora en tus labios cada vez más, y por cada burbuja que sube a la superficie incrementa tu fortaleza a la hora de afrontar esa corriente tan estridente en la que te metiste sin apenas ser consciente. Reconoces tu caída e intentas poder volver a flotar.
El océano es un lugar desconocido y nunca se puede saber qué es aquello con lo que te puedes encontrar. Muchas veces te sorprenden las tormentas que provocan mareas de sentimientos capaces de derrumbar cualquier sueño, pero si tienes un buen refugio donde poder cobijarte todo puede resultar mucho más sencillo.
Pero descuida preciosa, tu sonrisa volverá a aparecer y tus carcajadas me harán enloquecer de nuevo. El momento en el que tus aletas dejen de nadar, serán las mías las que tiren por las dos. Porque si tú te secas, yo también me seco, porque la felicidad está escondida en todos aquellos pequeños detalles que nos son tan difíciles de ver y yo voy a guiarte para que seas capaz de volver a sentirte como fuiste una vez.
Ser sirena no es sencillo, pero tú lo bordas en todos los sentidos.
jueves, 8 de septiembre de 2011
Cómo diablos se puede tener tanta suerte
domingo, 4 de septiembre de 2011
Que sólo entiendo de tu boca
viernes, 27 de mayo de 2011
Me partí por la mitad y dejé la peor parte
domingo, 15 de mayo de 2011
All I want to do in this lifetime is make you mine
El dilema viene cuando eres consciente de que aquello que tú creías real no es más que una mera ilusión. Y es ahora, al no reconocer ni tu mismo rostro en el espejo, cuando todo comienza a ser de verdad. Una desastrosa red de hechos que hace que tu vida se torne en locura, y la locura se haga realidad.
Y es que, por mucho que intente evitar lo inevitable, no tengo el suficiente valor de admitir que esto es lo que tengo y que posiblemente no vuelva a tenerte jamás por el simple hecho de que nunca fuiste mío.
¡Cuándo podré dormir con ese sueño en que acaba el soñar!
(Gustavo Adolfo Bécquer, Rimas)